El
Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) es un tratado internacional
jurídicamente vinculante con tres objetivos principales: la conservación de la
diversidad biológica, la utilización sostenible de sus componentes y la
participación justa y equitativa en los beneficios que se deriven de la
utilización de los recursos genéticos.
La
conservación de la diversidad biológica es interés común de toda la humanidad.
El Convenio sobre la Diversidad Biológica cubre la diversidad biológica a todos
los niveles: ecosistemas, especies y recursos genéticos.
El órgano
rector del CDB es la Conferencia de las Partes (COP). Esta autoridad suprema de
todos los Gobiernos (o Partes) que han ratificado el tratado se reúne cada dos
años para examinar el progreso, fijar prioridades y adoptar planes de trabajo.